Romina... II

Trabajé por 7 años en una constructora.. a mi cargo estaba el área de recursos humanos.. mis compañeros me estimaban, incluso hay uno que desde hace unos meses su trato hacia mi cambió, me miraba de una manera especial, no como amigo.. sentia que estaba en la espera de algo mas..
por supuesto nunca le fui infiel a Él, siempre cumplí con mi parte del trato, pero eso no impedia que en secreto disfrutara de las atenciones de otro, de sentirme deseada, admirada.. creo que eso hacia que el brillo de mis ojos fuera mas intenso, que mis mejillas tomaran otro tono... y que mi caracter resplandeciera, cosa que Él notó, y disfrutó..

Nunca me consideré una mala mujer por hacer eso, yo nunca busqué ni traté de que esa otra persona me viera de manera diferente, ni busqué un trato especial.. el solo se hizo ilusiones.. aunque de de admitir que despues de enterarme, alimenté esa ilusion...

Ahí debí de darme cuenta que algo dentro de mi estaba cambiando.. en todos los defectos que tenia no estaba el jugar con las personas.. eso no iba en mi..

Hola Romina, te vas a casa?

Aun no, faltan cosas por terminar.. y que haces a estas horas aqui?

este... pues, estaba revisando unos documentos y se me fue el tiempo.. por cierto, ya cenaste?

no, y ahora que me acuerdas ya me dio hambre je!

ah! pues te invito a cenar!

prefiero terminar pero gracias de todos modos, aparte no quiero arruinar tu noche, tal vez tengas una cita y no me gustaria entretenerte..

.... sabes bien que no salgo con nadie.. y tambien sabes que no estaba aqui por unos documentos... Romina,..

Creo que mejor me voy a casa, es tarde, tengo hambre y se que no podré terminar tanto papeleo, nos vemos mañana Saul, que pases buena noche..

Romina.. cuando podremos hablar?

ahora estabamos hablando

no; cuando podremos hablar en serio.. sobre nosotros..

Saul, nosotros somos amigos y compañeros, asi ha sido y asi será.

pero podria cambiar..


no lo sé.. hasta mañana Saul.



Esa fue la platica que tuvimos esa noche, recuerdo perfectamente sus ojos.. sus ganas de decirme aquello que yo tenia perfectamente claro.. pero si lo dejaba avanzar, si lo dejaba hablar entonces se perderia todo... perderia a un buen amigo, y tal vez hasta a un excelente elemento.. asi que lo mejor fue evitar que hablara de mas..

Algo que nunca en la vida me gustó fue el manejar de noche, me desesperaba el brillo de las luces, pero a partir de esa noche no solo eso era lo que me disgustaba, a partir de ahi empecé a sentir cierto temor.. las sombras me inquietaban de una manera que mis manos empezaban a sudar y mi corazon a palpitar.. nunca supe si fue por la platica que tuve con Saúl o era parte de el cambio que estaba sufriendo...